El juego que enganchó a millones de personas de todo el mundo también tiene sus curiosidades. ¿Quieres saber cuáles son?
Desde que apareció en el año 2000 el juego de los Sims, se incorporó la idea de vidas virtuales paralelas con las que la gente podía cumplir sus propios sueños, proyectándolos en pequeños “alter ego” digitales personalizables al punto de ser copias de los jugadores.
Básicamente se trata de una nueva manera de jugar a las muñecas y a controlar las casas y calles por las que éstos se mueven. No obstante, el jugador no puede simplemente hacer lo que le venga en gana, puesto que los personajes tienen necesidades básicas como alimentación e higiene, que deben mantenerse al día.
El creador del juego, Will Wright, ya había planteado ideas similares, como la serie SimCity, que tuvo gran éxito, pero fue hasta 1997 cuando le prestaron seriamente atención a su nueva idea que, tras un período de desarrollo muy complejo alcanzó su lanzamiento con la compañía Electronics Arts.
Algunas curiosidades
Según los desarrolladores del juego, el primer objeto funcional que se creó fue el retrete, que además es uno de los pocos que reacciona distinto a los hombres que a las mujeres. Cuando un hombre lo usa, deja la tapa abierta.
Los Sims se enferman, al igual que los humanos, y en algún momento se introduce un virus que afecta a los personajes. Se cree que los transmiten los conejillos de indias de los laboratorios virtuales en el mundo Sims. Los Sims tienen su propio lenguaje, el Simlish, así como su propia moneda, los simoleones, que deben obtenerse con trabajo, como en la vida real.
El éxito es tan rotundo que el juego ha obtenido ya tanto dinero como algunas grandes producciones de Hollywood. La primera versión del juego fue la más vendida durante tres años, y sólo perdió su hegemonía ante la aparición de Los Sims 2. A estas alturas se han recaudado 3 mil millones de dólares. Si te gustaron las 3 primeras entregas, te recomendamos descargar Los Sims 4, que ya se acerca al éxito comercial de sus predecesores.
En un alarde de modernidad, el correo francés le dedicó un sello de 0,30€, como parte de una serie dedicada a los videojuegos. Los Sims surgieron de la combinación de dos factores en la vida de Will Wright: el primero, su pasión por el estudio de la vida de las hormigas y su relación con la conducta humana, y el segundo, un incendio que destruyó su casa y que le inspiró para crear este genial juego.