Tal vez la extinción del pájaro dodo podría haberse evitado, si el ser humano no hubiese llegado a la remota isla en la que vivía esta especie. Sin embargo, es muy importante saber por qué se extinguió el dodo, para así tomar acciones a tiempo en caso de que se repita una situación similar en el futuro.
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¿Por qué se extinguió el dodo?
La forma en como se extinguió el dodo no está del todo clara. Sin embargo, se cree que una combinación de factores influyó en la desaparición de esta especie, y básicamente todos están relacionados con la llegada del ser humano al hábitat de este animal.
Los dodos vivían en la isla de Mauricio, localizada en el océano Indico, a unos 800 km al este de Madagascar. Mauricio es un territorio pequeño, pero bastante diverso, hay bosques, ríos, manglares y lagunas. Se piensa que el pájaro dodo habitaba los bosques de la zona, en donde frutas, semillas y raíces, eran algunas de las cosas que comía.
Durante miles de años, los dodos vivieron felices en Mauricio, pero todo cambió a principios del siglo XVI, cuando los exploradores europeos llegaron a la isla. Los primeros registros documentados de esta ave extinta datan del año 1598. Pero, ¿en qué año se extinguió el dodo?
No se sabe con certeza cuándo se extinguió el dodo. El último avistamiento de este animal tuvo lugar en 1662, cuando un navegante llamado Volkert Evertsz, naufragó en Mauricio. Se estima que para esa fecha quedaban pocos especímenes, por lo que se asume que el año de extinción estaría alrededor de 1690.
Factores que influyeron en la extinción del pájaro dodo
Pasaron menos de 100 años desde que el hombre llegó al territorio donde vivía el pájaro dodo hasta su extinción. Debido a esto, la mayoría de los expertos consideran que la influencia humana tuvo una incidencia directa en la desaparición de esta especie. Los tres factores determinantes en la extinción del animal dodo son:
- La caza: cuando los humanos llegaron a la isla de Mauricio, se dieron cuenta de que el dronte o pájaro dodo, no tenía depredadores naturales. Esto hizo que se convirtieran presas fáciles, porque la evolución los transformó en aves lentas que no podían volar. Los dodos tampoco le tenían miedo al hombre, lo que jugó un papel significativo en su proceso de extinción. La caza indiscriminada del pájaro dodo fue realmente salvaje y la población disminuyó velozmente en pocos años.
- La deforestación: una vez que los exploradores europeos arribaron a la isla donde vivía el dronte, comenzó la destrucción de su hábitat. Las personas talaron los bosques para construir caminos y edificaciones. Esto hizo que los dodos fueran desplazados a zonas de terreno más pequeñas, lo que a su vez se tradujo en una disminución de las fuentes de alimento. Por otra parte, muchos de los nidos de los drontes también se destruyeron en el proceso, porque estaban construidos en el suelo, entre la maleza. Esto contribuyó con el declive de su población, debido a que el pájaro dodo solo ponía un huevo en cada nidada.
- La introducción de especies invasoras: los exploradores que llegaron a Mauricio trajeron a muchos animales como perros, gatos y ratas. Una vez que estas especies invasoras entraron en contacto con el hábitat del dodo, su supervivencia se vio seriamente afectada, porque se comían sus huevos, destruían sus nidos y los mataban para alimentarse.
¿La extinción del pájaro dodo pudo haber sido evitada?
En teoría, la extinción del dodo pudo haberse evitado si los exploradores que arribaron a la Isla Mauricio en el siglo XVI, hubiesen tenido consciencia del problema que estaban ocasionando. Si este escenario se hubiese dado, tendrían que haber evitado cazarlos y destruir su ecosistema. Si esto no se cumplía, la última opción habría sido la de sacar algunas especies de la isla, y criarlas en un entorno apropiado para que sobrevivieran.
Información sobre el pájaro dodo y otros datos interesantes
Dodo, animal cuyo nombre científico es Raphus cucullatus, fue un ave no voladora endémica de la isla Mauricio. Formaba parte de la familia Raphidae, que a su vez pertenecía al orden de las palomas conocido como Columbiformes.
Los dodos eran pájaros grandes con un tamaño similar al de un ave real de la actualidad. Median casi un metro de altura y eran bastante robustos, pesando unos 20 kg en promedio. Su cuerpo estaba cubierto por plumas grises y blancas en la zona de la cola.
Los drontes tenían alas muy pequeñas y un pico curvo que los distinguía de otras especies de aves. Era amarillo, con la punta negra y tenía una longitud de unos 23 cm. También contaba con unos fuertes y gruesas patas de color amarillo.
Los dodos vivían principalmente en los bosques de la isla Mauricio, pero ocasionalmente podían ser vistos en la zona de la costa. Se estima que el pájaro dodo llegó a este sitio hace unos 26 millones de años, y debido a la falta de depredadores evolucionó hasta alcanzar su aspecto definitivo.
Se piensa que el nombre del pájaro dodo proviene de la palabra portuguesa “doudo” que en español se traduce como “simplón”, adjetivo que seguramente se le dio al ave, por ser fácil de cazar.
Debido a la época en la que se extinguió el dodo, hay pocas imágenes del ave en la actualidad. Por suerte, algunos de los exploradores que llegaron a la isla Mauricio se dedicaron a registrar las características físicas de estos animales. Estos datos permitieron a diversos artistas hacer la recreación del pájaro en imágenes, a través de dibujos y pinturas.
Otros animales que se extinguieron a causa del ser humano
Lamentablemente, el pájaro dodo no es el único animal que se ha extinguido como resultado de la intervención del hombre en sus ecosistemas. A continuación, se mencionan algunos de ellos:
La vaca marina de Steller (Hydrodamalis gigas)
Este animal fue encontrado por el biólogo Georg W. Steller en el año 1741. Las vacas marinas de Steller, vivían en el Mar de Bering, específicamente en las costas de las Islas Komandor.
Tenían un aspecto similar al de un manatí, pero eran mucho más grandes. Median hasta 10 metros de largo y pesaban aproximadamente 10 toneladas.
Las vacas marinas de Steller eran muy dóciles y se les podía ver flotando en las aguas cercanas a la costa. Desafortunadamente, no eran rápidas para sumergirse y esto las volvió un blanco fácil para los cazadores, que las mataban por su carne. La caza indiscriminada llevó esta especie a la extinción en menos de 30 años.
El alca gigante (Pinguinus impennis)
El alca gigante fue un ave no voladora que habitó en diversas islas del Atlántico norte, como Islandia, la Isla Funk y las Islas Feroes, entre otras. Su tamaño era de unos 75 cm en promedio y contaban con alas pequeñas que usaban para nadar.
Poblaciones enteras de alcas gigantes fueron masacradas por cazadores de aves que las utilizan como cebo y fuentes de alimento. Las alcas se extinguieron en 1884, luego de que los últimos ejemplares de la especie fuesen asesinados en la isla de Eldey.
La paloma migratoria (Ectopistes migratorius)
Grandes poblaciones de ectopistes migratorius cubrieron los cielos de Norteamérica hasta principios del siglo XX, cuando la caza indiscriminada las llevó hasta la extinción.
Mientras los primeros colonos se adentraban en Estados Unidos y avanzaban hacia el oeste del país, millones de palomas migratorias fueron asesinadas por su carne, que luego era vendida en los mercados de las ciudades.
Hacia la década de 1870, el declive en la población de esta especie se hizo evidente. Algunos científicos trataron de criarlas en cautiverio sin éxito. Finalmente, el 1 de septiembre de 1914, la última paloma migratoria, llamada Martha, murió en el zoológico de Cincinnati.
El tigre de Tasmania (Thylacinus cynocephalus)
Se le dio ese nombre debido a las rayas que tenían en su pelaje, que se asemejaban a las de un tigre, pero en realidad eran los marsupiales carnívoros más grandes que existieron.
Hubo un tiempo en que corrieron libre por toda Australia, pero tras la llegada de los exploradores europeos su hábitat se vio reducido a la isla de Tasmania. Fue en esa época cuando se tenía la creencia de que los tigres de Tasmania mataban al ganado, por lo que fueron asesinados sin piedad. En 1936 se les declaró como especie protegida, y justo en ese año se vio al último ejemplar en libertad.
Todos estos animales son la prueba de lo peligrosa que puede llegar a ser la humanidad cuando no es consciente de las consecuencias de sus actos. Los ecosistemas del planeta son muy sensibles y por eso, deben ser cuidados por todos sus habitantes, para así evitar que se repitan historias como la del dodo.
Saber lo que come el dodo, cómo luce o dónde habita, pueden haber sido algunas de las dudas que tuvieron las personas que vivieron en la época en la que esta peculiar ave existió. Desafortunadamente, en la actualidad, no hay ni un solo espécimen vivo, porque las acciones indiscriminadas del hombre lo llevaron a su fin.
La extinción del pájaro dodo es una de las mayores tragedias ecológicas que existen. Por ello, es importante conocer por qué se extinguió el dodo, para así evitar que historias como esta, vuelvan a repetirse.
